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3 consejos para liberar tu casa del estrés

El estrés es un síntoma emocional que afecta a personas de todas las edades y es cada vez más frecuente, esto debido a las exigencias laborales, el tráfico, las dificultades en la escuela, el cuidado de los hijos, de la casa, etc. Con toda esta presión a nuestro alrededor, el día a día no resulta fácil.

 

¿Cómo es posible lograr que tu casa siga siendo un lugar de paz, felicidad y serenidad? La verdad es que no existe alguna fórmula mágica para combatir los problemas de todos los hogares del mundo, pues cada familia tiene necesidades distintas. Sin embargo, es posible aplicar ciertos trucos para evitar que el estrés se instale en tu casa o incluso para que puedas mantenerlo al margen, ¡a tomar nota!

 

Mantén los espacios limpios y ordenados

 

El orden y la limpieza en el hogar generan serenidad y ayuda a que las energías positivas fluyan con mayor facilidad por el ambiente. Muchas veces, por más que limpiemos la casa, podemos llegar a sentir que esta podría estar mejor; un truco infalible para evitar el estrés es la creación de un punto focal en la casa. Un punto que vean todos los que entren y que siempre parezca ordenado. Esto generará la idea de orden y control, sensaciones muy pacíficas para algunas personas.

 

Dile NO a las luces muy brillantes

 

Las luces muy brillantes tienden a estimular los ojos y en consecuencia, a causar agotamiento y fatiga. Es por esto que para mantener tu casa libre de estrés, lo más recomendable es utilizar luces tenues, ajustables, la luz natural y/o velas. La luz de las velas transmite una energía muy positiva, capaz de generar tranquilidad, de apaciguar los ánimos y de crear una atmósfera más acogedora. Esta luz es capaz de calmar tensiones y de liberarte del estrés, más aún si la acompañas de un rico aroma. Por su parte, la luz natural es ideal para el ahorro energético y una iluminación más completa durante el día. Finalmente, las luces LED tienen efectos positivos para el ambiente y además dan la sensación de estar en presencia de una luz natural y tranquilizadora.

 

Evita el ruido

 

Aunque no lo creas, el ruido genera mucho más estrés del habitual y no es muy bueno acostumbrarse a esto. A veces pueden ser motivos de estrés la música o la TV a todo volumen, los gritos de los más pequeños, el ruido del tráfico que entra por las ventanas, etc. Evitar algunos ruidos no es fácil pero es muy necesario, trata de deshacerte de él, o al menos de reducirlo.


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